"No me van a dejar estos maricones"

Una de las noticias que más me han gustado de esta semana es la de la polémica frase de Marta Sánchez dando el pregón en las fiestas de Chueca. Hay opiniones para todo y como no podía ser de otra forma en este país de una simple anécdota se ha creado una avalancha de opiniones para todos los gustos. Incluso he llegado a oír (de boca de una amiga, nada oficial) que la abuchearon porque días antes de dar el pregón había dicho en una televisión local que daba el pregón por sus fans pero que no le gustaba que le relacionasen con "ese tipo" de gente porque no compartía sus gustos. En mi opinión mi amiga no podía estar menos informada, ¿quién en su sano juicio le invitan a dar un pregón en cualquier fiesta y pone a parir a los anfitriones? Con decir que no es suficiente, además no creo que Marta Sánchez tenga ningún problema con "ese tipo" de gente que le compra sus discos, más tonta sería ella.

Comento esta noticia por dos motivos: uno, porque me parece que Marta Sánchez es una gran rubia de corazón, como yo, pero que fue lo suficientemente valiente para ser rubia por fuera también lo que no le impidió hacerse una gran artista y dos porque siendo este año las fiestas de Chueca una celebración a nivel europeo me parece que actos como el del día del pregón no hacen más que evidenciar lo paletos que somos muchas veces por mucho que nos creamos europeos y el largo camino que queda por andar. A ver si dejamos de mirarnos el ombligo y alzamos la vista para ver que el mundo no se acaba en los Pirineos, ni en Guadarrama para muchos.

Sobre la polémica frase no tengo nada que decir, sólo que primero vean el vídeo y escuchen la frase en su contexto a ver si les sigue pareciendo homófoba.